domingo, 5 de diciembre de 2010

Segunda Conferencia del Ciclo de Formación Cofrade: La Caridad vivida y practicada


La caridad no significa dar al necesitado, podemos dar todos los bienes materiales que uno tiene y no estaríamos haciendo caridad, si no está inspirada por el amor que sentimos y procesamos hacia las personas con las que profesamos la caridad y aun así no hablaríamos de caridad sino de altruismo, pues la caridad nos exige a los cristianos que la practiquemos porque así lo quiere nuestro Señor Jesucristo. Este fue el comienzo de una interesante conferencia que sobre la Caridad vivida y practicada se desarrolló el pasado martes 30 de noviembre en los salones parroquiales de la Iglesia de los Dolores. Con estas precisiones conceptuales comenzaba el Reverendo Fray Juan José Hernández a sentar las bases de lo que representa la caridad para los cristianos y para la Orden de San Juan de Dios de la que es Superior. Contó con la presencia de dos hermanos más de la orden que relataron su testimonio vital y personal de cómo a través de su biografía como hermanos han practicado la caridad y desarrollado su labor asistencial con los más necesitados de nuestra sociedad.

Fray Juan José sin ningún tipo de impostación y artificialidad en su discurso nos trasladó de forma muy directa, cercana y clara a la cruda realidad en la que vivimos y como, con las dificultades propias de está, la Orden desarrolla su labor asistencial y caritativa.

La caridad como orientación de la vida exige empatía con las personas necesitadas ponernos en su lugar y saber que nos vinculamos con ellas en cuerpo y alma, sólo así hacemos caridad y podemos superar en su ejercicio toda la podredumbre de la condición humana. Asistir al enfermo en su situación extrema, con el hedor, orín o defecación, dolor y sufrimiento propio en el que los hermanos de la Orden trabajan fue el escenario al que fuimos traslados los asistentes a la conferencia.

Sólo desde éste contexto se puede comprender como las personas que renuncian a su vida personal para ejercer la caridad lo hacen por amor al prójimo y porque Dios así lo quiere. Estos dos acicates permiten superar la sordidez de la enfermedad, las miserias e inmundicias de la condición humana, la suciedad, el mal olor, el hedor, el dolor, la enfermedad terminal. Confortar al enfermo cuidarlo en su tránsito hacia la muerte, convivir con la muerte es la mayor satisfacción que en el ejerció de la caridad reciben los hermanos de la Orden. Y lo hacen por amor a la persona y en cumplimiento del designio de Dios. Hay que destacar la naturalidad con la que viven en su vida cotidiana el ejercicio de la caridad, en ningún momento hay atisbo de que encuentren ningún mérito en ello, es simplemente su vida y su misión en la misma.

Fray Juan José comenta como la unción a los enfermos le llena de satisfacción personal, y añade la comunión sí que cobra para él valor cuando se da al enfermo que sufre sórdidamente su enfermedad en el hospital y no llena de igual manera cuando se hace desde la placidez y comodidad en la Basílica de San Juan de Dios. En los dos casos es el mismo sacramento pero en el primero se le añade el acto de caridad.

El influjo del fundador en los hermanos de la Orden es el acicate para superar todo tipo de reveces y adversidades que existen en el devenir de su vida cotidiana, con Él todo se sobrelleva, el enfermo pestilente, con total ausencia de higiene, repleto de orina o de excremento. Fray Juan José en un acto de natural sinceridad manifiesta que no observa mérito en ello, pero si cuando en alguna ocasión ha tenido que superar la incomprensión que le ha venido desde dentro desde la misma comunidad.

Es digna de destacar la entereza con la que los hermanos se enfrentan en el ejercicio de la caridad y su labor asistencial en situaciones extremas, se encuentran con enfermos terminales que en número de dos tres mueren todos los días y hay que confórtalos, en el comedor de transeúntes atienden a los indigentes sin tener en cuanta algunos insultos o desprecios, el trato complicado y difícil con algunos enfermos mentales. Para ellos el ejercicio de la caridad en condiciones extremas es la enseñanza que obtienen de San Juan de Dios, al que consideran la Caridad hecha carne. Su ejemplo tiene tal presencia que les hace ejercer la caridad con todo naturalidad y sin encontrar ni buscar mérito alguno y reconocimiento.

Surgen hoy nuevas pobrezas debido a las desigualdades existentes en nuestra sociedad, son tantas las necesidades actuales que lo fácil sería caer en la frustración al no poder llegar a todas ellas, pero lejos de dejarse embargar por ella piensan en que Juan de dios provee cuando lo humano no llega, aunque se reconoce que la Orden en su compromiso y con sus medios hace lo que humanamente es posible. También se destaca la labor y función social, nada desdeñable en los tiempos que corren, que la Orden cubre, ya que tiene una extensa nómina de trabajadores a su cargo.

Finalmente Fray Juan José recoge con tristeza la realidad de la falta de vocación que existe en la actualidad. La Orden se plantea la posibilidad de agotar su existencia por la falta de vocación, en Granada son siete hermanos, de los que sólo dos no han llegado a la edad de jubilación. El hermano Cornelio que nos acompaña se ordenó como fraile hace ocho años y fue el último en hacerlo. A pesar de la cruda realidad hace un canto a la esperanza vaticinando que el siglo XXI será el de la espiritualidad. La historia de la humanidad es de naturaleza pendular y no se puede llegar más lejos en la carencia de valores espirituales y de prevalencia de lo material, a partir de ahí la sociedad y por tanto la condición humana debe reparar más en su dimensión trascendente. Claro está que esto no ocurrirá solo, habrá que empujar en la adecuada dirección para que suceda, aunque sabiendo que los cambios son muy lentos y más en la materia de la que hablamos. Predijo que no ocurrirá en el primer cuarto de siglo, lo haría a partir de la mitad del presente siglo, en su canto a la esperanza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.